jueves, agosto 30, 2007

La supuesta cerrazón de la ciencia.

Hoy he leído un comentario en un foro sobre las fuerzas telúricas. Se preguntaba el forista si creer en ellas es cuestión de fe o de razón y acusaba a la ciencia de querer tener la última palabra. Parecía como si quisiera que la ciencia respaldase esas fuerzas telúricas. Como si protestase: ¡Ays, por qué será la ciencia tan cerrada!

La primera cosa que se me ocurre es que la ciencia va ganando crédito y de ahí que se busque su conformidad. Lo que me parece muy bien. Pero también que no se la comprende.

La ciencia es abierta, por supuesto, cualquier verdad científica podría enunciarse como: con los datos de que disponemos y mientras no se demuestre lo contrario consideramos verdad que...

Lastimosamente es cierto que muchos defensores de la ciencia no tienen estas nociones básicas y le dan una muy mala imagen soberbia y dogmática.

Pero lo que pasa con las pseudociencias es que lo primero que los científicos suelen preguntar cuando oyen hablar de fuerzas y energías es ¿en qué unidades se mide esa energía?, y normalmente se quedan sin una respuesta convincente. O bien se anuncia un fenómeno extraordinario que no tiene lugar (casas encantadas, predicciones) o que se puede explicar de manera naturalista (combustión espontánea, verse uno mismo desde el techo) o que presenta proposiciones infalsables (psicoanálisis). Y así no hay modo.

Claro que la ciencia no lo explica todo ni mucho menos, y fantasía no nos falta. Tengamos en cuenta por ejemplo que el ochenta por ciento de los textos de Newton, de finales del XVII, comienzos del XVIII, son de alquimia y cosas de esas consideradas hoy supercherías, así que un interés muy especial de la ciencia ha sido como diferenciar lo científico de lo que no lo es, buscar medios de tener unas ciertas garantías de que las teorías tienen acomodo con la realidad, y en eso son estrictas.

De hecho, el método científico actual puede parecer como de banda de alimañas. Un científico enuncia una hipótesis o una teoría y el resto se lanzan como fieras a tratar de demostrar que es falsa, y se acepta mientras nadie lo consiga. ¿Cómo no iban a hacer lo mismo con lo que huela a superchería?

En definitiva se trata de saber, y una idea nueva y sólida que explica más cosas y mejor que las anteriores será bienvenida.
HispaLab
HispaLab